Sumado al castigo humano de desaparecer...las plantas ahora son "el malo de la película".
En EL FIN DE LOS TIEMPOS, ellas, y ciertas hormonas que liberan, son culpables de suicidios colectivos.
Eso sí: casi siempre los desastres mas importantes en el planeta, si de "ficciones" hablamos, ocurren en la costa este de E.E.U.U.
Dejando de lado estas casualidades cinematográficas, los invito a que si se clavaron con dicha vista, al menos aprovechen unos minutos a comentar que les pareció.
También acepto comentarios acerca de los inoportunos y exagerados comedores de palomitas de maiz.
sábado, 21 de junio de 2008
viernes, 20 de junio de 2008
A leer..solo unos minutos
ARBOLADO URBANO
(razones de pertenencia y otras cuestiones)
Agradezco a APEVU/RENACER por la invitación que hemos recibido todos los expositores, y digo todos los expositores porque durante el día de ayer y de hoy han colaborado a mi exposición, no solamente por lo expuesto sino por el grado de convencimiento personal y su compromiso.
Compromiso que en mi caso, sincerándome, es débil, pero no por débil poco entusiasta, menos a partir de ahora.
Soy un humilde “Técnico en Jardinería”, con ganas de expresar muchos sentimientos y opiniones.
Que crece c/día en su asombro por la observación y el contraste de lo aprendido a niveles académicos y lo que la naturaleza refleja en la ciudad.
Es real que el tema del arbolado urbano es un tema complejo en el que participan varios actores y c/cual con sus intereses particulares: el vecino (quiero destacar el interés particular de doña Rosa y don José por la necesidad de que no caigan hojas en su vereda en el invierno) arbolado, espacios verdes y los técnicos, idóneos, paisajistas, etc.
Ayer se habló de un paisaje urbano como un paisaje artificial, una estructura artificial. Esto es así. La naturaleza habitualmente no se expresa como se expresa en la ciudad.
Sabemos que en la actualidad, los problemas ecológicos son mayores, dirigen nuestro punto focal hacia otros rumbos, hacia problemas más relevantes que el expuesto en esta particular exposición. Aquí mismo y hace un rato se habló de la vida de la muerte…
En necesario, a pesar de esta observación que, generar y crear un espacio para la reflexión, estudio, y diálogo al respecto.
Concreto, real, sin falacias y con verdad
Es cierto que en la mayoría de los casos y por desconocimiento o siguiendo sus intereses, el vecino, se hace de autoridad, de un buen arco de sierra en el mejor de los casos, hacha, dientes y hasta la fuerza bruta sin más y realiza prácticas de poda o las solicita a distintos personajes, tomando como propio a ese árbol, halla o no sido plantado por el.
No obstante estas situaciones irregulares vale hacernos la pregunta:
*Nuestros vecinos conocen las normas establecidas para el arbolado urbano ?
*¿Sabe que ese árboles no le pertenecen como particular dueño, y que en realidad todos le pertenecen ?
*¿Porque subestimar su capacidad de comprender estas normativas ?
*¿En todos los casos el vecino, no debe ser considerado el dueño de ese o esos ejemplares?
*¿ Se propicia recomendar, asesorar, de modo particular y a toda la población?
Dejo así, la puerta abierta a otro de los actores involucrados en este tema tan complejo, es “El Ministerio de Espacio Público porteño que está implantando 50 mil especies nuevas para la ciudad. Conforme a lo planteado en el Plan Maestro del Arbolado de la Ciudad de Buenos Aires, se está cumpliendo con el axioma básico de la arboricultura: “plantar el árbol correcto en el sitio correcto”.
Axioma quasi revelador, pero incompleto para mi gusto, debería agregarse la densidad de plantación de estos árboles correctamente plantados. 50.000 árboles pueden plantarse en toda la ciudad como en 2 hectáreas si se quisiera.
Pertenezco a la zona sur de la ciudad donde la densidad fue muy grande y hoy están abandonados, habiendo consumido, tiempo, mano de obra, impuestos, agua para el cultivo en vivero, y otros ítems de producción de árboles que a un año de haber sido plantados ya no existen.
En el parque de las Victorias se han plantado árboles en su vereda….había que plantar 50.000 ni uno más ni uno menos.
Se han plantado Jacarandá en Av. Belgrano y si..Belgrano es una Av.que debe tener veredas de mas de 4 metros podría pensar el funcionario en su escritorio…pero se olvidó que Belgrano tiene unas cinco cuadras antes de Castro en el que es angosta y sus veredas no llegan a los 2mts. en algunos casos. Allí hay Jacarandá y no añosos…del año pasado.
*Es habitual que se antepongan la disponibilidad de especies a la utilidad de las mismas. Y saben porque? Porque en la Ciudad no existe un arboretum propio, un cultivo de árboles; no un depósito de árboles, sino un cultivo; existen amplios espacios en la ciudad para crear nuestro propio arboretum sin traer plantas de los alrededores poco adaptadas al nuestro clima urbano.
Tema Ficus, gomero, etc. No planto mas Ficus, ni en balcones, jardines internos, ni macetas; ese será un futuro árbol de vía pública, los Ficus crecen tanto que llegan a molestar adentro de casa y el mejor lugar que encontramos para la nueva ubicación es la vereda. Hay que ejecutar políticas eficientes al respecto; no sólo anunciar lo mal que le hacen a nuestro paisaje a nuestra salud, sino, aunque alguno se escandalice, intentar eliminarlos.
NO queremos árboles de hoja persistente..por lo menos en una Ciudad como la nuestra…si en un bosque..pero lamentablemente Buenos Aires no es un bosque.
Es norma el uso de especies con hoja caduca en todas las ciudades del mundo, necesitamos, muy al pesar de doña Rosa y don José que las hojas se caigan de los árboles.
SI nos acostumbramos al uso de ejemplares de hoja caduca sin excepción, podremos tener mas horas de luz natural en invierno, favoreciendo el menor gasto de energía. Entre otras virtudes de economía.
Rosita y José…necesitamos sus hojas, dennos el privilegio de llevárnosla y dejar limpia su vereda. Con eso aremos nueva materia orgánica, para los canteros de nuestras plazas a bajo costo, casi gratis.
Plazas que tendrán que ser realizadas nuevamente dentro de tres o cuatro años, ya que su futuro es el abandono. No están colocando sistemas de riego en las plazas, y en una ciudad como buenos Aires no puede concebirse un uso irracional del agua, los sistemas de riego suman costos pero economizan el mantenimiento. Están malgastando nuestros impuestos de este modo mientras que en campos de golf de la Ciudad no se paga impuestos por el agua utilizada en el riego.
Es hora de reconocer nuestro olvido e indiferencia, junto a un Estado ausente de este tema, a nivel ecológico y a las implicancias que traerá a la ciudad en un futuro, y al costo que nos genera a todos como ciudadanos que pagamos impuestos si continuamos sin cumplir y hacer cumplir la normativa presente.
E
l otro actor de este escenario: el idóneo, el técnico en Jardinería, el Jardinero, Paisajista
Espacios Público, muchas veces, no puede responder a las innumerables solicitudes de los vecinos.
Lamentablemente si queremos ser coherentes, nos toca a los profesionales, truncar los planes del vecino cuando no respeten las normas. Nos sentiremos incómodos pero es la mejor forma de saber si algo funciona.
Al hablar de Arbolado urbano, debemos poner como eje al sentido común y esto allanará el camino.
Este sentido común es el que debe reinar en todos los actores, y en nosotros los especialistas, en mayor medida.
Defender bienes naturales, y en este caso si hacerlos propios; hacernos cargo de la defensa de los pocos ambientes naturales que quedan en la ciudad, me toca en particular la zona sur de la Ciudad en donde vivo. Lugano
Uno de lugares mas reservado de la ciudad, donde los habitantes pueden encontrarse con las respuestas a sus cuestiones respecto de los árboles y en general puedan acercarse a esos espacios para confirmar como crecen en su mayor expresión los árboles de su casa.
Recordando una intervención de ayer se mencionaba el estadio de la Copa Davis, muchos de los concurrentes nunca había ido por allí y seguro no volvieron, comprobado por mi…muchos creyeron que habían pasado la Gral Paz y no estaban en la Ciudad de Buenos Aires.
Saben que? Me resisto a creer que la salvación de los Técnicos en jardinería o Paisajistas está en los country. Creo más en lo que existe desde hace más tiempo, la naturaleza no se puede construir, está, nos mira, dejémonos mirar, pero contemplemos.
Desde ayer han inspirado un buen deseo en mi, aunque el panorama sea calamitoso: “nada está perdido”
(razones de pertenencia y otras cuestiones)
Agradezco a APEVU/RENACER por la invitación que hemos recibido todos los expositores, y digo todos los expositores porque durante el día de ayer y de hoy han colaborado a mi exposición, no solamente por lo expuesto sino por el grado de convencimiento personal y su compromiso.
Compromiso que en mi caso, sincerándome, es débil, pero no por débil poco entusiasta, menos a partir de ahora.
Soy un humilde “Técnico en Jardinería”, con ganas de expresar muchos sentimientos y opiniones.
Que crece c/día en su asombro por la observación y el contraste de lo aprendido a niveles académicos y lo que la naturaleza refleja en la ciudad.
Es real que el tema del arbolado urbano es un tema complejo en el que participan varios actores y c/cual con sus intereses particulares: el vecino (quiero destacar el interés particular de doña Rosa y don José por la necesidad de que no caigan hojas en su vereda en el invierno) arbolado, espacios verdes y los técnicos, idóneos, paisajistas, etc.
Ayer se habló de un paisaje urbano como un paisaje artificial, una estructura artificial. Esto es así. La naturaleza habitualmente no se expresa como se expresa en la ciudad.
Sabemos que en la actualidad, los problemas ecológicos son mayores, dirigen nuestro punto focal hacia otros rumbos, hacia problemas más relevantes que el expuesto en esta particular exposición. Aquí mismo y hace un rato se habló de la vida de la muerte…
En necesario, a pesar de esta observación que, generar y crear un espacio para la reflexión, estudio, y diálogo al respecto.
Concreto, real, sin falacias y con verdad
Es cierto que en la mayoría de los casos y por desconocimiento o siguiendo sus intereses, el vecino, se hace de autoridad, de un buen arco de sierra en el mejor de los casos, hacha, dientes y hasta la fuerza bruta sin más y realiza prácticas de poda o las solicita a distintos personajes, tomando como propio a ese árbol, halla o no sido plantado por el.
No obstante estas situaciones irregulares vale hacernos la pregunta:
*Nuestros vecinos conocen las normas establecidas para el arbolado urbano ?
*¿Sabe que ese árboles no le pertenecen como particular dueño, y que en realidad todos le pertenecen ?
*¿Porque subestimar su capacidad de comprender estas normativas ?
*¿En todos los casos el vecino, no debe ser considerado el dueño de ese o esos ejemplares?
*¿ Se propicia recomendar, asesorar, de modo particular y a toda la población?
Dejo así, la puerta abierta a otro de los actores involucrados en este tema tan complejo, es “El Ministerio de Espacio Público porteño que está implantando 50 mil especies nuevas para la ciudad. Conforme a lo planteado en el Plan Maestro del Arbolado de la Ciudad de Buenos Aires, se está cumpliendo con el axioma básico de la arboricultura: “plantar el árbol correcto en el sitio correcto”.
Axioma quasi revelador, pero incompleto para mi gusto, debería agregarse la densidad de plantación de estos árboles correctamente plantados. 50.000 árboles pueden plantarse en toda la ciudad como en 2 hectáreas si se quisiera.
Pertenezco a la zona sur de la ciudad donde la densidad fue muy grande y hoy están abandonados, habiendo consumido, tiempo, mano de obra, impuestos, agua para el cultivo en vivero, y otros ítems de producción de árboles que a un año de haber sido plantados ya no existen.
En el parque de las Victorias se han plantado árboles en su vereda….había que plantar 50.000 ni uno más ni uno menos.
Se han plantado Jacarandá en Av. Belgrano y si..Belgrano es una Av.que debe tener veredas de mas de 4 metros podría pensar el funcionario en su escritorio…pero se olvidó que Belgrano tiene unas cinco cuadras antes de Castro en el que es angosta y sus veredas no llegan a los 2mts. en algunos casos. Allí hay Jacarandá y no añosos…del año pasado.
*Es habitual que se antepongan la disponibilidad de especies a la utilidad de las mismas. Y saben porque? Porque en la Ciudad no existe un arboretum propio, un cultivo de árboles; no un depósito de árboles, sino un cultivo; existen amplios espacios en la ciudad para crear nuestro propio arboretum sin traer plantas de los alrededores poco adaptadas al nuestro clima urbano.
Tema Ficus, gomero, etc. No planto mas Ficus, ni en balcones, jardines internos, ni macetas; ese será un futuro árbol de vía pública, los Ficus crecen tanto que llegan a molestar adentro de casa y el mejor lugar que encontramos para la nueva ubicación es la vereda. Hay que ejecutar políticas eficientes al respecto; no sólo anunciar lo mal que le hacen a nuestro paisaje a nuestra salud, sino, aunque alguno se escandalice, intentar eliminarlos.
NO queremos árboles de hoja persistente..por lo menos en una Ciudad como la nuestra…si en un bosque..pero lamentablemente Buenos Aires no es un bosque.
Es norma el uso de especies con hoja caduca en todas las ciudades del mundo, necesitamos, muy al pesar de doña Rosa y don José que las hojas se caigan de los árboles.
SI nos acostumbramos al uso de ejemplares de hoja caduca sin excepción, podremos tener mas horas de luz natural en invierno, favoreciendo el menor gasto de energía. Entre otras virtudes de economía.
Rosita y José…necesitamos sus hojas, dennos el privilegio de llevárnosla y dejar limpia su vereda. Con eso aremos nueva materia orgánica, para los canteros de nuestras plazas a bajo costo, casi gratis.
Plazas que tendrán que ser realizadas nuevamente dentro de tres o cuatro años, ya que su futuro es el abandono. No están colocando sistemas de riego en las plazas, y en una ciudad como buenos Aires no puede concebirse un uso irracional del agua, los sistemas de riego suman costos pero economizan el mantenimiento. Están malgastando nuestros impuestos de este modo mientras que en campos de golf de la Ciudad no se paga impuestos por el agua utilizada en el riego.
Es hora de reconocer nuestro olvido e indiferencia, junto a un Estado ausente de este tema, a nivel ecológico y a las implicancias que traerá a la ciudad en un futuro, y al costo que nos genera a todos como ciudadanos que pagamos impuestos si continuamos sin cumplir y hacer cumplir la normativa presente.
E
l otro actor de este escenario: el idóneo, el técnico en Jardinería, el Jardinero, Paisajista
Espacios Público, muchas veces, no puede responder a las innumerables solicitudes de los vecinos.
Lamentablemente si queremos ser coherentes, nos toca a los profesionales, truncar los planes del vecino cuando no respeten las normas. Nos sentiremos incómodos pero es la mejor forma de saber si algo funciona.
Al hablar de Arbolado urbano, debemos poner como eje al sentido común y esto allanará el camino.
Este sentido común es el que debe reinar en todos los actores, y en nosotros los especialistas, en mayor medida.
Defender bienes naturales, y en este caso si hacerlos propios; hacernos cargo de la defensa de los pocos ambientes naturales que quedan en la ciudad, me toca en particular la zona sur de la Ciudad en donde vivo. Lugano
Uno de lugares mas reservado de la ciudad, donde los habitantes pueden encontrarse con las respuestas a sus cuestiones respecto de los árboles y en general puedan acercarse a esos espacios para confirmar como crecen en su mayor expresión los árboles de su casa.
Recordando una intervención de ayer se mencionaba el estadio de la Copa Davis, muchos de los concurrentes nunca había ido por allí y seguro no volvieron, comprobado por mi…muchos creyeron que habían pasado la Gral Paz y no estaban en la Ciudad de Buenos Aires.
Saben que? Me resisto a creer que la salvación de los Técnicos en jardinería o Paisajistas está en los country. Creo más en lo que existe desde hace más tiempo, la naturaleza no se puede construir, está, nos mira, dejémonos mirar, pero contemplemos.
Desde ayer han inspirado un buen deseo en mi, aunque el panorama sea calamitoso: “nada está perdido”
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